Los amables lectores: Disculpe usted, simpático joven.
El autor: ¿Sí?
Los amables lectores: ¿Podríamos preguntar, más bien, señalar, otro detalle que nos preocupa?
El autor: Por supuesto, para eso estáis aquí, ¿no?
Los amables lectores: Sí, eso nos ha dicho usted, muy gentilmente.
El autor: Por favor, ¿qué queréis señalar?
Los amables lectores: Tiene que ver con la manera como trata usted a las personas cuando escribe.
El autor: ¿Sí?
Los amables lectores: Nos parece injusta, muchas veces, discúlpenos usted, incluso ofensiva.
El autor: ¿Ofensiva?
Los pacientes lectores: Sí, no es usted respetuoso con la gente.
El autor: ¿Con los personajes?
Los pacientes lectores: Perdone usted que nos metamos en sus cosas pero, sinceramente, nos parece muy desagradable la forma como trata a las personas en sus textos. A veces da la impresión de que odiara usted a la Humanidad, y que está tomando venganza por algo que le ha pasado, pero actúa usted agresivamente, contra todo, sin distinción, y eso no es correcto.
El autor: ¡Por favor, no penséis eso de mí! Mi concepto de la Humanidad es de lo más alto; cada día me sorprendo más con la gente, me maravillo; aunque como lector, tengo que decirlo, admiro el humor negro y, quizás, sí, la desfachatez, pero…
Los amables lectores: No se trata de humor, y perdone que le interrumpamos, es usted despectivo, y eso no tiene ninguna gracia.
El autor: Para mí sí, creo que cuando se llega a una desnudez absoluta, y…
Los amables lectores: Nada, presentando de esa manera a las personas que le quieren bien, cómo decirle, de esa forma, ¿desgraciada?, no creo que consiga usted nada.
El autor: Quizá es que no quiera conseguir.
Los amables lectores: Para que sus libros despierten algún respeto o admiración tiene usted que saber crear lazos con los lectores, y así no lo está consiguiendo, más bien al contrario, nos parece. Así no va a llegar usted a ningún lado, y por favor perdone que se lo señalemos de esta forma tan cruda.
El autor: Puede ser.
Los amables lectores: No es que pueda ser, perdone usted, es, seguro.
El autor: Puede ser que no quiera llegar a ningún lado, quiero decir.
Los amables lectores: Discúlpenos, pero ha hablado usted de honestidad y ahora nos dice esto. Si, como señala, usted no quisiera llegar a ningún lado, ¿qué sentido tiene dedicar tantas horas a sus escritos?
El autor: Esa es una buena pregunta.
Los amables lectores: Pues, joven, creo que tendría que contestarla, antes de proseguir.
El autor: Supongo que tenéis razón, y sí, lo intentaré.
Los amables lectores: Eso quisiéramos ver, por favor.
3 comentarios:
Joven escritor, ¿le molestaría si pongo un link de mi blog al suyo? es para no tener que hacer la ruta a siete. Gracias
C
por supuesto que puedes hacerlo, si encuentras la forma (en el mío yo dejé de poder, o sé por qué)
Me entiendo muy bien con las máquinas ;)
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