la fama, o es venerea, o no es fama (continuacion)

La esfera protege.
En el mundo inerte, la esfera emerge con facilidad en condiciones de isotropía, es decir, cuando no hay ninguna dirección privilegiada en el espacio. Por eso, al soplar el aire en un líquido, la burbuja adopta esa forma, la mínima que encierra un volumen determinado. La selección natural favorece la simetría circular en los seres vivos (huevos, medusas, erizos, frutas, semillas…) por dos razones: a) por el hecho de ser de superficie mínima, la esfera es la frontera con el exterior que pierde más lentamente el calor y b) por el hecho de no tener aristas, es la forma más difícil de agarrar o de morder. En cualquiera de los dos casos: la esfera protege.
Medusa. Semilla. Huevo. Coral.

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Lo primero que me viene a la cabeza, cuando pienso en ella, es el sabor salado del semen con lengua. Estábamos dentro de su coche, en un descampado que servía de parking, entre la playa y los restaurantes para turistas, en un pueblo cerca de Sitges. Ella ya estaba desnuda de la cintura para abajo. Ya se había corrido un par de veces con mis dedos, que habían estado trabajando delante y detrás. Yo seguía vestido, no quería follar dentro del coche con la gente pasando casi al lado de las ventanas. Ella sí, supongo, y por eso se fue hasta mi cinturón, lo desató, abrió el pantalón, sacó mi gusano y comenzó a usar su boca. Mamaba como pocas, una de las mejores que he conocido; y además, era una dulce mujer, de buenos sentimientos y esas cosas. Pero me adelanto, porque lo de su beso con bocanada fue en nuestra tercera salida y tendría que narrar, antes, las otras dos, por respeto al lector, a los valores literarios, a la moral y las buenas costumbres, a la coherencia estricta de este librito, a la vida como experiencia lineal, y a todo eso, digo.

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Retrato: no se qué de la danza, un mes de espectáculos, conferencias y videos continuos, auditorio con tres pantallas gigantes, entrada libre, documental sobre Jooss, sus orígenes, un clochard entra, se acerca, salta la fila de sillas sin despegarse del suelo, muestra un talón desnudo, sucio, se sienta detrás, no muy lejos, suena la Pavana para una infanta difunta, en las pantallas una mujer, vestida de menina, se mueve entrecortada, mitad bailarina, mitad autómata, acompañada por un grupo de figuras oscuras, el clochard ronca, comentarios, videos de archivo, y letras La table vert, dos grupos de bailarines, enmascarados de viejos decrépitos, gesticulan y bailan saltan a los lados de una mesa larga, el clochard se despierta, no porque le interese lo de Joss, sino por una niña que sale corriendo retumbando la tarima, porque al clochard Joss le da igual, los artistas no le sirven a los marginados, o sí, a veces, para abrir una sala seca, climatizada y oscura, con entrada libre, para proyectar, en las tres pantallas, a un hombre pintado, moviendo una bandera, dirigiendo una danza macabra, hasta que el clochard sale, aburrido, después de saltar la línea de sillas sin despegarse del suelo, mostrando un talón desnudo, sucio, otra vez.